No soy una gran amante del pollo ni mucho menos, pero he de decir que esta pechuga rellena, sale muy jugosa y sabrosa, a pesar de que los “pollos comerciales” no tengan mucho sabor. Como ya he comentado en alguna ocasión, en casa tenemos pollos criados caseros solo con cebada, maíz y la hierba que pican por el campo, pero como este pollo sale mucho más duro para hacerlo al horno, pues esta vez lo he hecho con pollo “de ciudad”.
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Quién dijo que comer fuera de casa y de tupper era horroroso??? Todo en esta vida es como te lo tomes, puedes comer mal en tu casa y en un restaurante, pero lo puedes hacer bien en cualquier parte, y como yo como todos los días en el trabajo, pues intento hacerlo de la mejor forma posible.
Aquí os dejo una receta muy sencilla y que gana de un día para otro.
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Domingo dulce, ahora vamos con unos bollos de mantequilla.
En la foto sale el bollo tan cual queda, pero si tenéis mermelada, nata o crema, abrid los bollos por la mitad y ponedles algo de relleno. Son una pasada!!! Además de rápidos y sencillos de hacer.
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Recordando los días de verano por tierras asturianas, que mejor que el frío invierno albaceteño para preparar una buena fabada con las típicas fabes asturianas, traídas desde allí y el acompaño de lacón, panceta, chorizo y morcilla, que también nos trajimos de Asturias.
He de decir que hasta hace poco tiempo las alubias no eran unos de mis platos favoritos, pero nada que ver con las fabes, que son toda una delicatessen, o a mi por lo menos me encantan, ¡ahí va la receta!.
¿A qué os recuerda? ¿¿A los cráteres de la luna??
Esta tarta queda genial y sencillisima de hacer, en poco tiempo puedes tener preparado un postre muy bueno y seguro que sorprendes a tus invitados.
Con esta receta participo en el 1er concurso de recetas de verduras organizado por Margot cosas de la vida
Un domingo cualquiera, estás en casa tranquilamente y llaman unos amigos, que van a “hacerte una visita”, resulta que no tengo pan… Qué faena… Pues me pongo a intentar hacer pan con alguna receta de las que encuentro por internet. Sin mucho optimismo por mi parte, pues creía en que el pan era más complicado de hacer, me pongo a ello. Resultado: Unas chapatas buenísimas, jugosas y que dan mucho juego, ya que las puedes rellenar con cualquier cosa que tengas en la nevera. Preparé chapatas de salmón y caviar (sucedáneo), y de foie con cebolla caramelizada y mermelada de higos.
La noche del 16 de diciembre iba a ser especial. Hacía ya unos días que se rumoreaba por Albacete la apertura de un nuevo restaurante en la zona de copas por excelencia de la ciudad y a través de la blogosfera habíamos averiguado que se trataba de un local de tapas y cocina creativa y era una cita que no nos queríamos perder, así que reunimos a nuestros amigos y nos dirigimos hacia allí con muchas ganas de probar la experiencia.
