Estamos preparándonos para la operación #bikini, y esto conlleva mucho esfuerzos. Así que últimamente solo cocino cositas muy ligeras y sanas, con muchas verduras y hortalizas. 

Esto para un blog no es muy bueno, por que ¿donde están lo dulces?, y  ¿las tapas?, es decir, la comida que nos gusta de verdad y que disfrutamos haciendo. Por que hacer unas verduras hervidas o un pescado al horno todos lo sabemos hacer, mejor o peor pero sabemos.

Harta de comer pure de verduras y calabacín, tenia una bandeja de champis por el frigo y como fritos no debía de hacerlos, pues al puchero y una cremita.

Para esta receta me inspire en el libro de 1080 recetas de Simone Ortega, pero como vi que podian quedar un pocos sosos con esa receta, la modifique un poco.

Os dejo los cambios en mi receta.

Ingredientes para 2 personas

1 bandeja de 200 g de champiñones

1/4 de cebolla

2 cucharadas de AOVE

1/2  L de caldo de pollo

1/2 vaso de nata

Sal

Pellizco de pimienta negra

2 yemas

Elaboración

Primero lavamos muy bien los champis y los troceamos pequeños. Troceamos también la cebolla muy finita.

Ponemos en un puchero el aceite y añadimos los champis y la cebolla. Tapamos y dejamos pochar.

Cuando todo este tierno, añadimos sal, pimienta y el caldo de carne, dejamos hervir unos 15 minutos. 

Lo último que ponemos es la nata, removemos bien, dejamos otros 5 minutos y retiramos.

Lo dejamos enfriar un poco para triturarlo, le pasamos la batidora y debe quedar lo más fino posible.

Si lo hacéis de un día para otro el sabor es mucho mejor y más fuerte.

Emplatado.

Cuando vayáis a emplatar, poner una yema en el cuenco donde vayáis a servir la crema y añadir la crema muy caliente, para cuajar la yema por fuera pero por dentro quedará liquida y en su punto. Podéis añadir unos picatostes por encima y un chorrete de AOVE.

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Elena Garcia